Voces sólo voces como ecos, como atroces chistes sin gracia. Los comentarios de los fans de Callejeros sobre sus primeros shows en el galpón de Once.
“La sucesión de bengalas es un desborde de locura sin guardabarreras”. Describió una crónica de los shows que Callejeros ofreció en la recién estrenada República de Cromañón a fines de mayo de 2004, siete meses antes de la tragedia. "El día que se prenda fuego y muera gente, que sus padres no desfilen en el programa de Mauro", comentó, profético, El Pulpo.
"Para la próxima estaría buenísimo llevar unas granadas. ¿Y por qué no entrar con un tanque de guerra y cagar a tiros a todos?", ironizó La Bernarda. "No me digas que te quemó el pelo el gil que tiró para atrás una bengala prendida. Yo siempre lo saco quemado, pero me chupa un huevo", agregó luego, trivializando un peligro que era evidente para todos los seguidores del grupo.
Fue una catástrofe tan anunciada que hasta hubo otro profeta, Nikki, que puso en duda que Callejeros pudiera sobrevivir a una sola actuación más en medio de tanta pirotecnia.
Bajo el título "Cromañón les quedó chico", Yanina Mazzarella redactó una reseña de las actuaciones de Callejeros celebradas en el recién inauguradp galpón, el sábado 28 y el domingo 29 de mayo de 2004, siete meses antes de la tragedia que comenzará a juzgarse en agosto en el escenario en que se juzgó en 1985 a las Juntas Militares de la última dictadura.
La crónica se publicó en la ya decana revista electrónica El Acople (http://revistaelacople.blogspot.com/), que luego del desastre, se bajó de la página, a pesar de lo cual todavía puede leerse en la red*. En ella, Mazzarella adelantó que Callejeros tocaría en "el mítico estadio Obras" el 31 de julio. En sus comentarios, los fans del grupo expresaban su optimismo sobre lo pronto que la banda tocaría en el Monumental, lo que nunca pudo ser y posiblemente nunca sea.
El éxito de los shows en Cromañón se debió en parte a que "los volanteros se multiplicaron", escribió Mazzarella. Tenían "la misión de cubrir con anuncios a todo el que se atreva a pasar por la calle Mitre, atravesando la estación, y toda su población de esqueletos", agregó, hilvanando una frase que leída desde la actualidad causa escalofríos. Su comentario se refirió al show dominical, que comenzó temprano.
"Son las ocho recién pasadas y todavía quedan muchas adicciones por absorber. Entonces, siempre hay una esquina desde la cual preparar las gargantas, ensayar alientos, sincronizar fuegos", continuaba.
"Cuando todavía no había comenzado el ritual, todo Cromañón, rebosante de gente, de banderas y de barrios, agitó desaforado 'El final es en donde partí', tapando la voz lejana de Chizo (el presentador de la banda)"."Un silencio y otra voz, esta vez muy ronca: 'Quiero agradecer a Callejeros porque gracias a ellos abrimos Cromañón. Muchas bandas me dieron la espalda, no así Callejeros'. Chabán otra vez dando el presente. Después de (…) pedir encarecidamente que no enciendan bengalas 'porque el humo es cancerígeno', (Chabán) aprovechó para expresar su felicitación a Eli Suárez (de Los Gardelitos) 'porque el martes en Cemento se la rebancó'".
"Las luces se apagaron, y Chabán dejó de hablar de bengalas, fechas, tiros y techos (…) y las bengalas fueron las protagonistas, porque a pesar de las advertencias “sigo, y no escucho porque mucho de lo que está prohibido me hace vivir. Y ahí, cuando suena 'Prohibido', y todo Cromañón arde, (…) La sucesión continuada de bengalas durante cada tema es una expresión más de este desborde de locura, que sale sin guardabarreras".
"Más de veinte bengalas de todos los colores, corridas, andanzas de mujeres a caballito, banderas llegando hasta el escenario. Misión cumplida. 'El nudo' fue el tema más fogoso, gracias a Los Invisibles de siempre, esos de 'la inoxidable pasión', o 'siempre las mismas caras'. Los invisibles ahora, fueron los músicos, porque la gran humareda levantada impidió por un largo rato toda visión. 'No volvieron más' desató el orgullo argentino, con los típicos 'el que no salta es militar'".
"Pasó el humo, se secó el nudo, y ellos volvieron a ser visibles. Pato pidió: denme una tregua de dos canciones, sin bengalas. Obvio, se cumplió sólo al principio".
"Última pausa, y a la vuelta, Pato (Patricio Santos Fontanet, vocalista y líder del grupo) se sacó las ganas de decir todo lo que tenía atragantado: 'Este tema va para todos los que creen que descubrieron algo nuevo. Sepan que esto está hecho por nosotros, y por ustedes, los que nos siguen desde siempre'. ( …) Pato tenía más por decir: 'Mi sueño era esto y lo cumplí”, confiesa antes del fin, con ‘Ilusión', en la que se funde en un interminable abrazo con el batero Eduardo Vázquez".
"Ellos siguen cantando 'No somos nadie', pero saben que crecieron y ya no son lo que eran, pero tienen muy claro que no se dejarán llevar por la presión…".
Fin de la crónica. Hubo muchos comentarios. "Inventario", por ejemplo, dijo que "Cada vez aguanto menos a Pato. El cree ser Dios pero es un siome". Para los que están fuera de la neolengua juvenil: "siome" es una palabra del neo lunfa que los pibes volvieron comodín. Como, por ejemplo, "chabón" (vesre "boncha", derivada de "chambón", sinónimo de "torpe"), o "bardo", (poeta o, según Aníbal Troilo, "el que dice que está viniendo y nunca llega", aunque ahora se usa como sinónimo de "quilombo"), que secundan a ese "boludo" que está siempre en boca de (casi) todos y es como el pan de todos sus bocadillos. En el lunfa antiguo "shiome" es pobre, empobrecido, berreta.
En un segundo mensaje, "Inventario" cuestionó que en Cromañón, Santos Fontanet le hubiera dedicado el show a Korneta Suárez, el cincuentón líder y vocalista de la banda Los Gardelitos que en abril último había aparecido pareció muerto en confusas circunstancias. "Inventario" recordó que el vocalista había mencionado a Korneta varias veces, y agregó suspicaz que tras recibir la noticia de la muerte del líder de la banda del Bajo Flores, Callejeros había seguido "moviéndose y festejando en (el) Museo del Rock", por lo que puso en duda la sinceridad del homenaje. Y apostilló: "No es todo color de rosas en Callejeros: también son caretas".
En cambio, "La Bernarda" (LaBernarda, seudónimo que, como se verá, resultó de un varón) se mostró chocho con las actuaciones de Callejeros en Cromañón, hasta el punto de decir que habían sido "las dos mejores fiestas que presencié" y destacar que en ellas había habido "mucho agite, muchísimas banderas, una cantidad única de bengalas (…) hubo como 20", reprochándole a la redactora Mazzarella que su "nota no nombra las cajas de misiles que prendimos…".
Bernarda/o reputó como "muy cómico" y "mentira" lo dicho por Chabán desde el escenario acerca de que "las bengalas (son) cancerígenas", comentando que "las únicas (que lo serían) son las de una marca especifica, no todas, ni las de luz". Se burló seguidamente de las exhortaciones de Chabán a no encender bengalas: "… se deliró (y dijo) cualquier cosa y lo más cómico (que dijo) fue: 'no prendan bengalas porque no dejan ver el show'. Ja ja ja ja, qué hijo de puta, me cagué de risa", escribió. Y se burló también de (para ella o él) tan absurda pretensión de Chabán con estas palabras: "Tampoco salten ni nada porque me hacen transpirar. Y no lleven banderas y paraguas porque no se ve el show. Y no tiren papelitos y globos porque ensucian el suelo".
"Ay, Bernie. No puedo creer que seas tan pelotudo", le respondió "Pérezlindo" (un seudónimo muy usado por la policía). "Si (las bengalas) son cancerígenas o no, no lo sé. Lo que sé es que pagás 15 mangos para no ver un carajo (es cierto que no se ve nada) y no poder respirar. ¿La nota no nombra la caja de misiles? Qué grosso. Bin Laden Bernie fue a ver a Callejeros…", ironizó.
"Coincido con Inventario que las giladas que dice el pelotudo de Pato sobre Korneta se las meta en el orto", escribió "Guasón" (otro seudónimo de policía), quien tampoco ahorró dardos para el empresario organizador. "Y Chabán... dejame de joder... ahora tampoco se puede fumar adentro de Cromañon porque hace mal...por Dios". Añadió como quien dice "¿A dónde vamos a ir a parar?"). Para "Guasón", en el show del sábado "había mucha gente y era demasiado incómodo".
"Respecto a la bengalas, el mejor que lo resumió fue El Tanque, ja ja ja ja: El día que se prenda fuego algo y muera gente, dejen escrito que no vayan sus padres a desfilar al programa de Mauro (Viale) y a Magazine de la tarde", es la impresionante reflexión que dejó "Pulposesta".
"Che, ¿cómo no publicaron lo de los misiles de Bernardo, desconsiderados de mierda", intervino Félix. "Para la próxima estaría buenísimo llevar unas granadas", agregó. "¿Por qué no entrar con un tanque de guerra y cagar a tiros a todos?", se zarpó.
"Me causo mucha gracia la cita de Cortázar 'Todos los fuegos son el fuego' (sic) en una nota de Callejeros en Once. Muy gracioso. Para la (sic) próxima 'Bestiario'", le recomendó "Tonga" (que se presentó como hincha de la banda desde la primera hora) a la redactora.
"Las bengalas matan (sic) prenderlas en un estadio, en un lugar despejado. Si no te asfixian, no ves una poronga", comentó el deslenguado "Nikki Sixx". Y sorprendentemente añadió, no sabemos si con humor vitriólico o porque realmente padecía un cáncer: "Ayer empecé un tratamiento de quimioterapia por el show del viernes (…) adiós mi hermoso cabello".
Unos diálogos después, "La Bernarda" se quejó de que su humor no hubiera sido interpretado y reafirmó su pertenecía a la tribu de Callejeros: "Si pago 15 mangos para no ver un carajo ¿Cuál hay? Yo voy porque lo siento. Si no me quedo en casa y escucho el cidí. A los shows voy a ver a la banda dejando todo” porque es “la fiesta de la gente. Y si vas, te vas a dar cuenta de lo emocionante que es un show así, a diferencia de (los de) otros grupitos que te debés cagar de embole".
Después, seguramente intrigado por el lúgubre comentario de "Nikki", le preguntó "¿Qué pasa? ¿Te quemaron el pelo? No me digas que fue el gil ese que tiró una bengala prendida? Eso sí que es de gil. (Me refiero al) que tiró para atrás una bengala prendida. Yo siempre salgo quemado así, con chispitas. Pero me chupa un huevo, vale la pena". Y agregó que eso "no quita que los giles que tiran las bengalas encendidas, o en vez de hacer (un) hueco para tirar los petardos, los tiran al medio de la gente, me den bronca".
Otro mensaje de "Inventario" ofrece abundante material para el análisis sociológico y psicológico, ya que a pesar de ser fuertemente critico y aun insultante con el cantante y líder de Callejeros ("Pato, creés ser Dios y sos un gordito boludo", le espetaba) termina con un "Aguante, Callejeros. A copar Obras".
Tomándose acaso intencionadamente para el churrete el apellido de la cronista, escribió "El Repo": "Aguante Yanina Muzzarella". Y anunciar que iría al show de Obras sin dudarlo. "!!Esta vez voy de una!!".
"Dudo que lleguen al mes que viene...", respondió tan lúgubre como taciturno "Nikki Sixx".
Poco después, "La Bernarda", tras acusarlo de haber desertado, desafió a "Perezlindo" a continuar su intercambio de impresiones y denuestos. "Perezlindo" respondió tratándolo de "retardadito" y marcándole sus insalvables contradicciones dentro de una misma frase ("Si pago 15 mangos para no ver un carajo…voy a ver a la banda dejando todo…") para instarlo a ir a Obras llevando "un par de tanques, bombas atómicas y demás elementos bélicos…".
Unos mensajes más adelante, y en nombre de Callejeros, escribió Lucas, de Wilde y de El Fondo no fisura, uno de los dos grupos de seguidores de la formación. Recordó que antes que en Obras, ésta tocaría en 25 de Mayo, provincia de Buenos Aires, con entradas a 5 pesos. Y que esperaba que todos los que decían ser fanáticos de Callejeros fueran a "hacerle el aguante a la banda".
"La Bernarda" se quejó después de que Pérezlindo se hubiera tomado lo que el había escrito sobre "los misiles" en serio, sin reparar en que era una broma, y más adelante señaló que seguramente iba a extrañar los viejos shows en Cemento "cuando nadie se quejaba porque (se) prendían bengalas".
A pesar de su talante hipercrítico, Inventario dio amplios detalles de su pertenencia a la tribu de seguidores de Callejeros desde la primerísima hora, "desde que éramos 5, ni 50 ni 500 sino sólo 5" y rematar con un "para nosotros Obras era una utopía, ahora River no queda tan lejos". Eso no hizo que disminuyera el volumen de críticas hacia su vocalista, a quien criticó ácidamente porque "le chupás el traste a la gente ‘famosa’ como los reidores de Fantino, ni siquiera a Fantino, sino a unos simples reidores, que su único trabajo es (hacer) reir" y de ser un "buscador de fama" cuyo "único anhelo es aparecer en Intrusos con Rial…". Y cosas mucho peores que revelan que, al menos entre los seguidores de Callejeros, había muchas fisuras. Por Juan Salinas [Noticias Urbanas]
